La primera edición online del encuentro «VEM» ha posibilitado que los niños de la archidiócesis se reunieran en sus parroquias para pasar un día de convivencia cumpliendo las medidas sanitarias.
Vocación, eucaristía y misión son los tres ejes que dan nombre al encuentro «VEM» que reúne cada año a los niños que participan en las catequesis de 4º, 5º y 6º de primaria en la archidiócesis. Este año, a causa de la pandemia, el formato del encuentro se ha adaptado para lograr que los chavales se reunieran en pequeños grupos en sus respectivas parroquias y participaran de forma virtual en un nutrido programa de divertidas actividades en común que han posibilitado impulsar la dimensión diocesana en cada uno de los 16 grupos inscritos en el que este año se ha llamado «i-VEM».
Una veintena de voluntarios, entre técnicos y presentadores, ha posibilitado una emisión en YouTube de más de 2 horas y media de duración en directo. A través de la pantalla, los grupos participantes han tenido que ir completando un total nueve pruebas (desde amasar el pan a disfrazarse como curas o monjas, hacer un regalo para los misioneros o ubicar en el mapa distintos países, entre otros), dando debida cuenta de sus logros y aciertos a través de un grupo de WhatsApp habilitado para ello. Junto a las pruebas, el programa se ha completado con testimonios de seminaristas, religiosos y familias y el propio arzobispo, don Mario Iceta, que se han conectado a la emisión a través de distintas plataformas digitales.
Además, los niños han ganado su «jubileo» en este Año Santo de la Catedral, al ingresar de forma virtual en el templo gótico y rezando la oración del Año Jubilar.
Enrique Ybáñez, delegado diocesano de Pastoral Vocacional y uno de los organizadores de este ciber encuentro junto con las delegaciones de Catequesis y Misiones, destaca la ilusión del equipo que ha posibilitado la emisión, desde los que han estado detrás de las cámaras a los que debían recibir las respuestas y computar los votos de las pruebas, que ha ganado el equipo de la parroquia de San Juan Bautista.
«Hemos logrado que los niños vuelvan a sus parroquias por otro motivo que no fuera el simple hecho catequético o litúrgico; una oportunidad de que los niños se reunieran fuera de la actividad habitual, algo que hacía tiempo que no habíamos podido hacer a causa de la pandemia», subraya Ybáñez. Destaca el «interesante formato» logrado, que ha posibilitado un «encuentro diocesano interactivo y divertido», donde los chavales no solo han seguido en directo una emisión, sino que han podido participar a través de pruebas y retos. Una muestra más de que internet y las tecnologías de la información y la comunicación no están reñidas con la evangelización en las parroquias.